lunes, 7 de junio de 2010

"Quizás. Un relato" - De Lillian Hellman.


"QUIZÁS. UN RELATO" - DE LILLIAN HELLMAN

Le dije a Hammett:

- Tienes un hermoso cuello. Es tan sorpresivo. Nervudo y potente, y el resto de ti es tan delgado y...

Esa noche en especial, Hammett había tenido que darse la vuelta porque el más excéntrico de nuestros poodles, Meg, saltó encima de él, y Hammett se hizo a un lado porque uno debía tener cuidado con lo que le pasara a Meg por la cabeza.

Me dijo:

- Lilly, me has echado ese discurso sobre mi cuello quizá no menos de cien veces. Pero, ¿nunca se te ha ocurrido que decirle a un hombre que su cuello es atractivo y no decirle nada del resto de su cuerpo puede ser una falta de tacto?. A mí, no me importa, pero tú siempre quieres saber cuándo actúas con tacto y cuándo no...

- No es de eso de lo que estoy hablando ahora - le contesté - Lo que quería decir es sólo que tu cuello siempre huele bien. Y yo, ¿no siempre huelo bien?

- Siempre - me contestó - y también tontita, y ese asunto del olor está arraigado en algún lugar que deberías poder descubrir, u olvidarlo en definitiva.

Al día siguiente, le dije:

- Dios mío, eres brillante.

- No me digas - replicó - Será algo así como ¿no es una maravilla que yo sepa abrirme los pantalones para orinar cuando montones de niños de dos años no pueden?

Las pilas y los bultos y las cintas y los harapos se vuelven años, y entonces los años se desvanecen. Hay una luz detrás de ti ciertamente, pero no es lo bastante brillante para iluminar cuanto esperabas. La luz parece ensombrecida o enmascarada por un género desconocido. Lo que era sólido muro de convicciones aparece ahora en pesadillas, o en la enfermedad, o simplemente en momentos de debilidad (...) Es entonces cuando una dificilmente puede ubicarse en el tiempo. Todo aquello que hubieses jurado haber sido puede encontrarse de nuevo, sólo si tienes la energía de cavar con ahínco suficiente, y eso es duro para los pies y los lomos, y en ocasiones temes que cerca de un borde no haya nada. Me parece que eso son los Cameron para mí. Quizás eso, y otras cosas también.


Sobre Lillian Hellman: 

Nació el 20 de junio de 1905, en New Orleans. Es conocida por su compromiso político con causas izquierdistas; por su relación sentimental con Dashiell Hammett y su larga amistad con Dorothy Parker (de quien fue su albacea). Su primer gran éxito fue "The Children's Hour", de 1934. Se negó a testificar ante el 'Comité de Actividades Antiamericanas' en 1952, al ser acusada de comunista.


Lillian Hellman. "Quizás. Un relato". (México / Fondo de Cultura Económica / 1984). Título Original: "Maybe. A Story". Traducción: Felipe Garrido. Transcripción.

Si bien el libro refiere a Sarah Cameron - amiga, conocida o personaje de Lillian Hellman - resulta interesante la particular evocación que la escritora hace de su cómplice literario, Dashiell Hammett. Para muchos, este texto adopta la forma de una confesión cifrada. Pero, lo cierto es que los límites entre realidad y ficción son difíciles de determinar.


¿Por qué no dedicárselo a Fabián Sancho?... Para un compañero inusual. Silvia G.

No hay comentarios:

Publicar un comentario